Construido sobre el solar de las antiguas Atarazanas islámicas,era un sitio destinado a la reparación y construcción de barcos.De aquella primera construcción solo se ha conservado su puerta principal de la época nazarí del siglo XIV.
Entrar al Mercado de Atarazanas es dejarse llevar por el olor ,color y el ir y venir de la gente.Gusta sobre todo ,ver esas obras de arte que son los puestos con sus géneros ,perfectamente montados,parecen autenticas postales,listos para ser vendido y pregonado a los cuatros vientos por los vendedores de los puestos: Ay niña mira que boquerones llevo!!! Mira mira que chirimoya y que tomates mas buenos,que me los quitan de las manos!!! Que almejas mas buenas tengo!!!
Solo os digo que tiene que ser una visita que tenéis que apuntar en vuestro libreta de visitas ,os aseguro que se puede definir como un autentico museo viviente por todo lo que encierra en su interior.
No dejéis de visitarlo!
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